¿Por qué soñamos? El descubrimiento que cambió la neurociencia del sueño

¿Por qué soñamos? El descubrimiento que cambió la neurociencia del sueño

En la década de 1950, Eugene Aserinsky descubrió la fase REM del sueño y su asociación con los sueños vívidos, desafiando las interpretaciones psicológicas tradicionales. Esta fase, que representa entre el 20 y 25% del sueño, involucra actividad cerebral intensa, y se caracteriza por sueños narrativos y emocionales, revelando un vínculo vital entre sueño, memoria y creatividad.
¿Sabías que eres el escultor de tu propio cerebro?

¿Sabías que eres el escultor de tu propio cerebro?

La plasticidad cerebral permite que nuestro cerebro se adapte constantemente a las actividades diarias. Un estudio de Gindrat et al. (2015) mostró que el uso de teléfonos táctiles altera la actividad cerebral, particularmente en el pulgar. Este fenómeno resalta cómo el cerebro se reconfigura según nuestras interacciones cotidianas.
Plasticidad Sináptica y Memoria: El Legado de Kandel

Plasticidad Sináptica y Memoria: El Legado de Kandel

Eric Kandel, neurocientífico pionero, exploró cómo se forman los recuerdos a través de cambios sinápticos en el cerebro. Utilizando el caracol Aplysia californica, sus investigaciones conectaron la plasticidad sináptica con la memoria. Su trabajo revolucionó la neurociencia y estableció vínculos entre la biología molecular y el comportamiento humano, impactando tratamientos para trastornos neurológicos.
El pensamiento no viaja a la velocidad de la luz

El pensamiento no viaja a la velocidad de la luz

Durante siglos, la electricidad fue un misterio fascinante. Si un estímulo eléctrico podía hacer que la pata de una rana muerta se contrajera, ¿sería la electricidad la base de nuestras ideas, movimientos y emociones? ¿Sería el pensamiento un rayo que recorría los nervios a la velocidad de la luz? Veamoslo...
Los ritmos del cerebro: El lenguaje oculto de nuestras neuronas

Los ritmos del cerebro: El lenguaje oculto de nuestras neuronas

Cuando pensamos en el cerebro, solemos imaginar un órgano caótico donde millones de neuronas disparan impulsos eléctricos sin descanso. Sin embargo, como señala György Buzsáki en su obra "Rhythms of the Brain", este aparente caos está organizado por una sinfonía de ritmos cerebrales que sincronizan la actividad neuronal y permiten que el cerebro funcione como un sistema coherente.